Contrastes en Viernes
Los contrastes humanos jamás dejan de sorprenderme, la no existencia de lo uno sin lo otro… me parece fascinante, esencial, me cuesta concebir un mundo sin ello. Y aún así, seguimos separándolos, haciéndonos creer que el blanco y el negro están en esquinas opuestas del espectro, olvidando que son hermanos, olvidando que se dan la mano.
Aunque las tareas últimamente me poseen, sigo aquí, y espero seguir por mucho tiempo. Tras las catastróficas desdichas acaecidas últimamente, vino una despedida que no por pospuesta podía ser cancelada, aunque ha sido malentendida por mucha gente… no es que me despida de este blog, al que digitalmente llamo hogar, es que se cierra la comunidad que cree en su día, en la que además de este blog, nacieron muchos otros.
A lo que iba, que me pierdo, que es Viernes, y cuando la semana es tan frenética como la que he tenido, se ve todo con otro color… precisamente, el opuesto al Lunes, aunque como decía, los contrarios se dan sentido (no es que hubiera fumado nada, no).
Hoy me hubiera gustado escribir un relato afortunado, aunque breve, algo como lo que escribe Dani, pero tengo la cabeza demasiado llena de cosas como para ver qué siento debajo de todo eso. Así que, a falta de esas palabras afortunadas, desearos al menos un gran fin de semana…
Y concluyamos con un sensacional oleísmo con el que me siento muy identificado.
Te cojo la pregunta sobre las rarezas prestadas para una encuesta :) que tengas un buen finde!
Abrazos que no suelen contradecirse