Enseñar a valorar lo que se tiene
Cuando te acercas a los cuarenta empiezas a valorar cosas que quizás nunca te habían preocupado. El otro día me dolía la yema del dedo que uso para el móvil, y cada vez que lo tocaba sentía una quemazón que tardó un día en pasarme, es increíble como algo tan pequeño puede joder tanto. Esta semana me atormenta un gemelo, y no puedo bajar escaleras sin que me duela, y eso te hace valorar lo importante que es poder caminar con normalidad y tener las piernas sanas, cómo limita no poder bajar una escalera.
A raíz de eso, pensaba que estaría bien que se hicieran ejercicios con los niños sobre estas cosas. ¿Vendar un par de días los ojos a un niño? Sería un gran experimento, y enseñaría mas a ese niño que meses de interminables lecciones, pues vería, nunca mejor dicho, el mundo de un modo diferente, y valoraría una cualidad como la visión como nunca antes.
Es como cuando de pequeño te ponen una escayola protegiendo un esguince o un hueso roto. Te sientes raro durante unas semanas, aunque no afecta a tu vida tanto como otros escenarios, más allá de no poder ducharte con normalidad o de esos picores mortales en sitios a los que no llegas.
Hay que poner a prueba la vida, ponerse en otras pieles, echar de menos cosas… todo contribuye a crecer.
Deberíamos hacer ese ejercicio de vivir sin algo aprendiendo a darle su verdadero valor, antes de que lo perdamos sin opción a recuperarlo, antes de que el tiempo o el azar nos lo quiten.
Sí, yo cada día trabajo un poquito mejor la gratitud. Y respeto las decisiones de quienes quiero, aunque les lleven…
Cuanta razón querido katre! Yo me siento un poco asi, dándome golpes contra una pared! El miedo paraliza y no…
¡Muchas felicidades! Es un placer y una pequeña dosis de esperanza seguir viéndote por aquí. Brindo por otros tantos años…
20 años no son nada... felicidades por mantener intacta tu integridad y tu actitud ante la vida! Peor para el…
Qué alegría saber de ti Fran ¡Cuánto tiempo! Sí, es una película diferente, de las que dan que pensar y…