Coinci*que*ncias in*esperadas

La verdad es que la calma en mi vida es como una noche sin sexo en la Mansión Playboy…. una utopía, vaya, o eso, o que están pintando, pero las redecoraciones duran como mucho de un par de semanas a un mes, y luego vuelve la «fiesta».
El Viernes de la semana pasada estaba yo algo mustio, cansado, mohíno, cuando una llamada a modo de flashback me hizo volver de nuevo a recorrer las calles de Talavera, todo bien… contento, sin vértigos ni nervios, tranquilo, escuchando mucho… y disfrutándolo. Era ya tarde, y cuando vi por donde iba la conversación me di cuenta atónito, que yo había soñado con aquello, no sé si despierto o dormido, pero lo «visto» ahora era real ¿Predicción, intuición o deducción? No os hagáis ideas raras, tan solo «soñé» con algo que pasó en ese momento, como un Dejavú, pero conseguí adelantarme a sus palabras y decirle antes de que me lo dijera lo que iba a decir (tal y como lo había «soñado») y claro, impresiona… lo bueno de cumplirse, es que quizás lo mio tenga cura, hasta ahora todos se han cumplido, bueno, todos menos uno, pero eso… doy fé, no se cumplirá, por destino u orgullo, o ambos.
Y si lo sé, ya podría soñar con la Lotería, me voy a ir a un bingo a ver si con tanta bolita influensio mis sueños…

AVISO A NAVEGANTES: Sigo desvariando bajo estas líneas…
pero yo de ti me lo pensaría, es un poco coñazo.

Luego una conversación ligera con mamá, y después de esas 3 horas… a ver un ratito la tele, la mente ya estaba en ebullición y preparada para el fin de semana, nada la podía parar… esa noche aprendí que cuando un ave fénix arde, después de unas cuantas veces, llega un momento en el que no le duele tanto o casi nada.

El Sábado me perdí en rutas poco transitadas del tiempo y el espacio, me di un baño con mis peces, me corté el pelo en un sitio donde me trataron muy bien y por una vez me hicieron el corte que quería (Hola buenassszzz, que quería cortarme las puntazzzzz y ponerme mechazzzzz…), porque una lo vale.

El Domingo fue genial, con la casa en estado perfecto, me levanté temprano, hice de chef y las suelas de las zapatillas vuelta y vuelta no me debieron de quedar mal, pues me regalaron una amaranta preciosa, un principito en medio de la ventisca y un Mazinger Z, aunque lo mejor de ese Domingo fuera la compañía y lo cálido de la tarde.

Y hoy, ironías de la vida, pensando en un email que debo escribir esta semana, vi como se daba una ironía curiosa. Mis dos últimos «lo que pudo ser y no fué» acabaron de un modo similar… y en ambos casos, casi sin empezar, se esbozó una frase que era algo así como «Si cuando estoy contigo estoy bien, pero…«, y mi reacción interior fue la misma en aquellas situaciones, pero me la reservo por respeto. Pues hoy, al dibujar mi email, me vino a la mente una frase… «Si cuando estoy contigo estoy bien, pero…» y claro ¡Leñe! Ahora la entiendo, eso se dice cuando con esa persona hay química pero no hay amor… ¡Acabáramos! Soy capaz de entender que alguien no pueda enamorarse de mi, hasta ahí no llega mi soberbia y todos cometen errores, pero no es más fácil decir eso que lo del «Contigo bien, sin ti no tanto«… a todo esto, ya estoy dando consejos que pa mi no quiero.

Este es uno de esos clásicos posts que acaban en borradores… y nunca ven la lú en Interné… pero no, hoy no, creo que no ofendo a nadie con mis desvarios ¿no? Si es así, disculpeseme, por favor, es que con tanta conciquencia inesperada… tenía que contarlo.
Yo empecé esto con la intención de escribir un post profundo, y parece un radio patio… ¡Aish!
Ánimo con la semana!