Música, Aire y Agua

Al cruzar la puerta pone fin una nueva jornada laboral, y cuando miro al cielo me sorprende no solo que esté claro, sino que sea tan azul… precioso azul, sigo sin encontrarle una explicación a que algo tan cotidiano me llame tanto la atención. Camino acompañado de alguna de las nuevas melodías que las últimas semanas se han añadido a mi lista de canciones mágicas, hay música que es capaz de hacerte volar… en mi caso elijo temas que me hagan más fácil el camino a casa, hay días que el optimismo crece solo y otros has de regarlo en abundancia, y esta música es hoy mi agua… y me hace resbalar por la ciudad, por sus cuestas, evitando agujeros y restos caninos, elevándome la cabeza, observando caras mientras realizo descabelladas teorías sobre su vida en base a cuatro segundos que les cruzan conmigo, animando tímidamente mi agotado corazón tras un día duro… bendita música, acceso directo a rincones de nuestra alma casi desconocidos por nosotros mismos… hay días que el aire tiene forma de canción.

Tras esos 9 minutos, tras 2 canciones, llego a un cartel con forma de rombo que me avisa que la música sigue pero se acaba el fluir del aire… miro al cielo antes de meterme en el metro… ¡qué hermoso cielo azul! me da pena sumergirme de nuevo con los grandes gusanos de la especia que surcan esta ciudad que me acoje, ese instante, ese cielo, consigue que me venga a la mente el fondo de pantalla que puse ayer en mi ordenador, no recuerdo la última vez que un papel tapiz me había dejado atónito tantos segundos contemplándolo, por su calidad, su belleza, y en medio de aquel paisaje mágico recuerdo especialmente esa piedra, con un círculo tallado, diciéndome tanto, escondiendo y otorgando, y le dedico mi última y mejor sonrisa al claro día contemplando ese cielo celeste… y antes de bajar el primer escalón este me susurra en silencio que mañana habrá luna llena.

Instantes antes de bajar los primeros escalones, alguien me mira a escasos metros mientras escucha una canción en su iPod, mi sonrisa le cautiva y le deja sin aire y aunque aún no lo sepa ese instante tan eterno como fugaz se quedará grabado en su retina para siempre, sin que tenga sentido el cómo ni el porqué… irá unido a una canción, que será su agua en sus días más tormentosos, y nunca se volverá a cruzar conmigo.

«… All of my life
Where have you been?
I wonder if I’ll ever see you again
And if that day comes…»
 


LENNY KRAVITZ
Again