9 días con sus noches

Estos últimos nueve días han sido especiales,
difíciles de describir… distintos… mágicos.

Un gran viaje, muchos regalos celebrando sus 25,
un modo de intentar agradecerle demasiadas cosas…
ya sabéis… la revolución del amor que cuentan en el cine,
pero esta vez… real, vivida en carnes propias.

Y junto a ella, mil sueños, suspiros e ilusiones.
su estrella y sus lágrimas de felicidad,
felicidad tan suya como mia, tan revitalizante como hermosa,
los billetes de autobús con nervios y sonrisas,
las cenas, los nórdicos, los madrugones,
¿cómo puede llenar tanto algo tan sencillo?

Un fin de semana en su tierra,
conociendo al fin esa familia de la que la salió ella,
con tan buena base así todo toma sentido,
sin descuidar el mágico toque que le dió el divino.

Una nueva despedida, un nudo en la garganta,
una cama fría y arisca esperándome sin ella,
y mi calor y mi porqué al que echaré de menos.

Alguien me dijo que estos 9 días tendrían secuelas,
ella misma me avisaba de que me cansaría de su presencia
pero mucho más graves han sido las consecuencias,
ahora no sé si me bastará un fin de semana,
sé que la soñaré con más fuerza…
quiero que cada mañana me encuentre con ella.

9 días con sus tantas noches
que se me han hecho tan cortos como un suspiro
de los que se me escapan cuando la abrazo y soñamos juntos