Elementos
El pez parecía ahogarse,
el pájaro se negaba a abrir sus alas,
y ambos se reían de mí
que atónito,
me había quedado sin palabras.
El universo me negaba el aliento,
con la boca abierta contemplando
a la hija de los cuatro elementos.
Cómo no soñar aquella boca,
cómo no recordar,
aquel encuentro,
sus ojos hogar,
aquella bola de billar,
que no pudo caer más adentro.
;)
La vida te da sorpresas…
Achuchón!