Otoño
Llevamos tan solo una semana de otoño; el frio, la lluvia y el viento se encargan de recordárnoslo a diario. El sol sale mas tímido por las mañanas y cada vez se se acuesta antes, y nosotros poco a poco iremos sacando los abrigos y preparándonos para un invierno que llegará antes de que acabe el Otoño.
Supongo que el frio deja ese algo nostálgico en el aire, y en estos días se hace inevitable echar mucho de menos a esa hadita con la que acurrucarse en el sofá, un abrazo de mamá o un rincón para tus pies en una mesa camilla.
Las cosas que me han ido pasando últimamente me han hecho sentarme a pensar, recapacitar sobre el mundo y mi forma de vivirlo… por lo demás mi vida no ha tenido grandes cambios, la gente que quiero sigue a mi lado demostrándome la realidad de aquello que decían en Tango Feroz: «El amor es más fuerte».
Mientras tanto, si hicieramos una radiografía de mi cabeza encontraríamos un poco de todo: tranquilidad al ver bien a mi familia, orgullo al ver la gran mujer en la que se ha convertido mi hermana, falta de inspiración para un nuevo diseño del blog, interés nulo por la actualidad deportiva… y una profunda preocupación por alquien a quien quiero muncho y no veo bien del todo. A veces creo tener la sensibilidad afinada y saber cuando alguien está bien o no, y en algún caso pregunto: «¿Estás bien?«, a lo que casi siempre responden «¡Si!«. Evidentemente, no sabes si es cierto o la procesión va por dentro, solo puedes desear que lo sea y esperar que si algo le preocupa a ese alguien te lo cuente, obsesionarse con ayudar a esa persona puede convertir esa sensibilidad en susceptibilidad, y esto último es algo que no debería formar parte del carácter humano.
Hola Kike, no te preocupes, a mí me pasa igual con la gente, a veces quieres ayudar pero si esa persona no se abre es o bien porque de verdad no pasa nada o porque es demasiado complicado para poder ayudar. Aún así siempre habrá que respetar la decisión y postura de esa persona.
No podemos ir siempre de salvadores del mundo.
Un beso enorme y no te preocupes tanto, el tiempo lo cura todo.
Por lo menos, no dejes de estar ahí, de preocuparte, porque aunque a la persona le cuesta reconocer sus momentos débiles o lo que sea, apreciará que te intereses por ella.
Un abrazo, missing you… (y gracias, u know) ^.^