Siempre Vetusta… (I)

El otro día en Ámsterdam me desperté cantando «¡Alto!«, de Vetusta Morla, y en mi espera en el aeropuerto, escuché el disco entero un par de veces. Me di cuenta de lo mucho que tenía que ofrecerme, y de que quizás no había sido justo con el tercer disco de...